Ubicación perfecta para desconectar, rodeada de montañas y ríos. Casa con encanto y estupendamente rehabilitada. Desayuno completo y bueno. Habitación de lujo con terraza y vistas al río. Personal encantador y atento. Oferta de cena y bar. Servicios y estancias para el ocio.

Ningún fallo.

Casa Grande da Ferreria de Rugando Hostal es simplemente impresionante. La restauración y el diseño del lugar son maravillosos. Nos quedamos fascinados con la belleza de la casa y su entorno natural. La limpieza y comodidad de las habitaciones también fueron excelentes. Nos encantó poder disfrutar de las terrazas con vistas al río, y el ambiente tranquilo nos permitió desconectar por completo. Los desayunos y cenas ofrecidos fueron fabulosos, y la atención de Carmen fue impecable. Definitivamente volveremos.

El acceso a la casa puede ser un poco complicado debido a una carretera estrecha y con curvas. encontramos que el desayuno era un poco escaso.

nuestra segunda estancia en rugando fue aún mejor de lo esperado. la casa grande da ferreria de rugando nos sorprendió con su entorno natural, habitaciones espaciosas y limpias, y una piscina climatizada que agregó un toque especial a nuestro tiempo allí. el trato cercano del personal y la deliciosa cena y desayuno caseros también fueron puntos destacados.

El lugar es fabuloso, con una montaña maravillosa y un río justo en frente. La casa tiene una piscina natural preciosa y también una piscina cubierta. Las comidas en el pazo son deliciosas y caseras. Además, la atención del personal es increíble, ofreciendo habitaciones con balcón y siendo muy amables en todo momento.

El acceso desde la carretera principal puede ser complicado y peligroso, especialmente por la noche. Sería recomendable que se tomaran medidas para mejorar la seguridad en el camino al hotel.

La limpieza impecable del hotel, las instalaciones de primera categoría y la comodidad de tener estacionamiento disponible. Además, la ubicación en medio de la naturaleza es ideal para aquellos que buscan tranquilidad. La amabilidad y atención del personal fue destacable, especialmente preparando platos vegetarianos.

No hay nada que no me gusta.

El entorno de Casa Grande da Ferreria de Rugando Hostal es absolutamente tranquilo y propicio para descansar. El paisaje de montañas y la belleza natural son un privilegio para despertarse. La casa está bien cuidada y tiene mucho encanto. Aunque no tuvimos suerte con nuestra habitación, seguramente hay otras más bonitas.

Nada, todo estuvo bien.

Situado en un entorno tranquilo con hermosas vistas a la montaña. Personal amable y servicial. Habitaciones cómodas y bien equipadas. Ofrecen servicios adicionales como cena y bar. Piscina climatizada con hidromasaje.

La estancia en este lugar fue un verdadero placer para los sentidos. Disfruté de las maravillosas vistas al río desde la terraza, realmente espectaculares. Además, la habitación en la que me alojé era espaciosa, cómoda y estaba impecablemente limpia. El baño también era excelente, con una bañera antigua que le daba un toque de encanto.

El único inconveniente que encontré fue la falta de información por parte del personal de recepción. No supieron darme detalles sobre el precio de la cena, el desayuno o el horario del comedor.

El entorno natural espectacular. La casa antigua y bien conservada.Personal atento y amable.Piscina climatizada con vistas a la montaña.

No se me ocurre nada.

Mi estancia en este hotel fue simplemente maravillosa. El entorno tranquilo y hermoso capturó mi corazón. Además, el hotel se destacó por su impecable limpieza y la atención brindada por el personal fue excelente. Las habitaciones eran cómodas y ofrecían vistas impresionantes. También disfruté mucho de las instalaciones del hotel, como la piscina que estaba abierta las 24 horas. En general, este hotel fue una elección perfecta para relajarse y disfrutar de todo lo que este asombroso destino tiene para ofrecer.

Entorno natural precioso y tranquilo, atención del personal muy atenta y familiar, habitaciones espaciosas y acogedoras, piscina climatizada con vistas a la montaña.

Acabo de regresar de una estancia de dos días en Casa Grande Da Ferreria De Rugando y estoy encantado. El entorno natural es precioso, perfecto para aquellos que buscan paz y tranquilidad. Las habitaciones son espaciosas, cómodas y están impecablemente limpias. Además, las zonas comunes son acogedoras y decoradas con gusto. Irresistible es la piscina climatizada, algo que pocas casas rurales ofrecen. La cena y el bar son muy convenientes, especialmente considerando que no hay muchas opciones de restaurantes cerca. Y los desayunos, aunque no están incluidos en el precio, son fabulosos.

De verdad que lo aconsejo.

El entorno es relajante con sonido de río cerca. Conserva esencia de construcción original con salas de lectura y billar. Habitación grande y acogedora con terraza privada. Personal atento y familiar. Piscina climatizada con vistas a la montaña.